La casa Isabel Marant se funda en 1995, en París.

Todo empieza en 1989, cuando Isabel Marant lanza Twen, su primera marca de prendas de punto y jerséis, a los 22 años de edad. Desfila por primera vez bajo su propio nombre en 1995.

y en 1998, Isabel Marant abre su primera tienda en París, en lo que antes era el taller de un artista. A día de hoy, su tienda sigue estando en la rue de Charonne, en el barrio de la Bastilla. En el año 2000, la casa lanza Isabel Marant Étoile, una nueva línea más desenfadada que pretende combinar un estilo tanto artístico como casual. La línea de caballero nace en 2017, seguida de la colección Eyewear en 2021.

Han pasado más de 25 años desde su fundación y nada ha cambiado: Isabel Marant sigue siendo la casa de moda francesa más indisciplinada. En el moderado mundo de la moda parisina, la diseñadora es considerada una alborotadora. Apasionada de los materiales que viven y viajan, se inspira en todos los rincones del mundo para revitalizar la moda urbana con irreverencia. Mientras algunos sueñan con mujeres iconos sobre papel satinado, Isabel las viste para la vida cotidiana, ya sea para subir en moto o pasear por la calle. Ninguna prenda sale de su taller sin que ella se la haya probado antes. Maravillosa mezcla de creatividad desenfrenada, seducción asumida y búsqueda incansable del placer, la casa Isabel Marant es una oda al desorden sublime de la vida.

Apasionada de la artesanía, Isabel apuesta desde siempre por el trabajo hecho a mano y lucha, colección tras colección, por la preservación de la artesanía textil, especialmente a través de su fondo de dotación, creado en 2021. Ese mismo año, la casa lanza Isabel Marant Vintage, una plataforma digital que brinda una segunda vida a prendas Isabel Marant, una solución orientada hacia una moda más circular.